4.- Leyenda del origen de la virgen de Miramonte En su diario, solitario y monótono deambular por los campos que rodean al pueblo, un joven pastor de Biscarrués venía observando, desde hacía cierto tiempo que todos los días, sin excepción alguna, una de las cabras de su rebaño se alejaba sola de las demás, regresando de nuevo al seno de la manada transcurrido un cierto tiempo. Movido por la curiosidad decidió seguirla algún día y vio que se adentraba en una cueva natural excavada en roca caliza de un montículo. No dudó en penetrar y halló una bella imagen de la Virgen –luego llamada de Miramonte- y una campana de mediano tamaño. Cuando, tras poner a buen recaudo su ganado, llevó la noticia del hallazgo se organizó una procesión con el párroco al frente, decidiendo trasladar a la imagen y la campana a la iglesia. Algunos años cuando el rey Sancho Ramírez decidió enfrentarse a los musulmanes pasó por Biscarrués para ponerse humildemente bajo el amparo y pedir la intercesión de la Virgen